Noticias
La observación del equipo educativo de los intereses de todos los niños y niñas que asisten a la sala cuna Marcela Paz de la Corporación para la Infancia de Santiago, sumado a una mirada inclusiva y la creatividad sin límites de sus educadoras, hicieron posible la creación e implementación, en el patio del centro educativo, de un maravilloso recurso didáctico que denominaron “Los visores de colores” que permiten a los niños y niñas la oportunidad de observar su entorno desde diversas perspectivas.
En palabras de la educadora del nivel, Rosa Hernández Fredes, “estos permiten a todos nuestros niños y niñas observar y explorar el entorno de diferentes maneras, experimentando nuevas posibilidades a través de combinación de colores (anteponiéndolos), reflejos según luz solar, movimientos por corrientes de viento, etc., logrando favorecer así el vínculo con su entorno, las interacciones con otros por medio del juego que generan espontáneamente, la participación, la exploración y el disfrute de los espacios educativos”.
La experiencia de aprendizaje de los visores de colores, considera varios aspectos: como la edad de cada niño y niña, la etapa exploratoria y sensorial propios de su nivel, las diversidades presentadas en el grupo y sus intereses, niños o niñas diagnosticados con TEA (trastorno del espectro autista) la observación y la incesante búsqueda del equipo educativo por implementar espacios y recursos pedagógicos atractivos para todos los niños y niñas en general, creando y disponiendo de estos elementos para el grupo general de niños/as, pero apuntando principalmente a un enfoque de Educar en la diversidad.